“EN TODO FUIMOS ATRIBULADOS”

(2 Corintios 7:5 ). Por que nos conduce Dios de este modo y permite que la tribulación sea tan dura y constante? Bien, en primer lugar, porque muestra la suficiencia de Su poder y gracia mucho mejor que si hubiésemos estado exentos de la tribulación y de la prueba “El tesoro se encuentra en vaso barro, para que la excelencia del poder sea de Dios y no de nosotros”. Ello nos hace más consciente de que dependemos de El. Constantemente Dios esta tratando de enseñarnos de quien dependemos, y nos cogemos por entero en Su manos y nos pone bajo Su cuidado. Este es el lugar donde Jesús estuvo y donde El quiere que estemos, no sostenidos por si mismo, sino con una mano siempre apoyada sobre la Suya y con una confianza que no se atreve a dar un paso a solas. Ello nos enseña confianza. No hay modo alguno de aprender fe sino por medio de la prueba. Es la escuela de fe de Dios, y es mucho mejor para nosotros el aprender a confiar en Dios que el gozar de la vida. La lección de fe una vez aprendida, es una adquisición eterna y una fortuna que se hace para siempre; sin confianza, aun las mismas riquezas nos dejaran pobres. ¿Por qué debo llorar, cuando otros cantan?Para probar las amarguras del sufrimiento. ¿Por qué debo trabajar mientras otros descansan? Para gastar mi fortaleza cuando Dios lo mande. ¿Por qué debo perder cuando otros ganan? Para comprender el dolor agudo de la derrota. ¿ Por que debe pertenecerme esta vida Cuando la tuya es mucho mejor? Por que Dios sabe los planes que han de florecer para mi en la eternidad.”